jueves, 30 de diciembre de 2010

ALAS DE COLIBRÍ

Hace algunos meses cero que hice mención a ella.
Hoy me apetece escucharla. Todavía.

miércoles, 22 de diciembre de 2010

FELICES FIESTAS


Y próspero año nuevo.

PD: Para lo poco que me gustan estos días sin sentido, no me saldré del guion.

Nos vemos.

sábado, 11 de diciembre de 2010

HELLO EVERYBODY AND EVERYBODAS!!


Juro firmemente que lo que acá relataré es completamente cierto, no más que de esta misma tarde, en el mismo comienzo de una clase de inglés que cierta persona tenía el gusto de impartir para un grupo de personas de mediana edad, dentro de uno de esos cursillos de formación que algunos sindicatos financian para el regocijo de Zapatero.

Comienza la teacher diciendo “Hi, guys!” Le contesta un señor-alumno que qué significa eso de “guys”. Se le contesta oportunamente. Así, pregunta cómo habría que decir en español “¡Hola, chicos y chicas!”, que sería lo suyo en esta España nuestra, de Psoe y otras siglas afines que ahora no recuerdo. En vista de que el hombre no se enteraba, la profesora cambia la expresión por un más genérico “Hello, everybody!” Y nada. El coleguita en cuestión preguntó cómo podría decir en inglés “¡Hola a todos y a todas! “¿Cuál es el femenino de everybody?” He ahí el verdadero trasfondo de la cuestión. En alguna que otra entrada lo hemos tratado de manera chusca, como en esas recomendaciones que hace poco ha sacado la Junta de Andalucía acerca del supuesto lenguaje sexista que usamos. Entonces dije que tiempo habría de hablarlo más en serio y creo que llega el momento. La triste confusión que la clase política está generando en la sociedad poco a poco va calando. Es el ejemplo expuesto arriba un caso más que evidencia el lastre que nos está generando la discriminación a nuestra propia lengua, como si, realmente, decir “nosotros” excluyera a las mujeres, o “reunidos los vecinos” no tuviera en cuenta también a ellas, aquí presentes. Con el “everybody”, encuentro un buen ejemplo para dignificar nuestro sapientísimo lenguaje. No hay sexo en las palabras, hay género, cosa bien distinta. En inglés, “todos” son “todos” , y basta (al igual que en castellano, se ponga la depuesta ministra de igualdad como se ponga, se indigne o no un concejal en Fresnedillo con el asunto). No genera en otras lenguas un ridículo debate sexual el empleo de la palabra justa, apropiada y con su sentido inmediato. Eso, el sentido, es lo que nos viene faltando por aquí desde hace bastante tiempo.