1.- Siempre hay que mentir sobre el puesto en que se quedó en la clasificación general. Nadie estuvo allí y mucho menos lo va a comprobar.
2.- Si ves que vas a quedar el último de la categoría, abandonar siempre fingiendo un dolor, por simple y pura dignidad.
3.- Cuando se quede en un lugar no deseado de la clasificación, achacarlo siempre a agentes externos, como el viento en contra, desconocimiento y dificultades del terreno, camiseta nueva, lesiones anteriores, etc. Vamos, lo que sea.
4.- A la frase: “Correr es de cobardes”, siempre hay que responder: “Cobarde tú, que no eres capaz ni de correr detrás de un billete de 500 euros”.
5.- Decir en público que nos gusta correr y disfrutar de la competición, aunque interiormente tú sepas que lo haces para poder comer dulces a granel y vacilar con los amigos.
6.- Imprescindible un calentamiento previo antes de cada carrera, pero eso sí, delante de mucha gente, para poder demostrar nuestras cualidades y estado físico, ropa deportiva de moda, etc.
7.- En este calentamiento, es conveniente hablar con los demás corredores para hacer gala de nuestra deportividad, aunque por dentro pensemos: “Cuidao el io-puti lo cachita que está, y encima dice que no se ha podío prepará la carrera, será farso er nota, ara, que a este lo quemo yo en el tercer kilómetro”.
8.- Recoger todo lo que te den de propaganda, para demostrar al menos que estuviste en la carrera.
9.- Presumir con los amigos de lo bien que corriste, aunque estés “reventao” o “lesionao”.
10.- ¡COMPRAR LOTERÍA DEL LUGAR DONDE SE ORGANICE LA CARRERA!
Feliz Navidad, y ojalá en el próximo año consigas ganar un premio aunque sea de consolación y esfuerzo. Aquí te dejo algo para que cojas fuerzas para la carrera de San Silvestre.
Tu amigo invisible
Valme Cueli Caro