Nuestro Hugo, por más señas Santos y Gil, se ha embarcado en un Pregón de once varas. Una exaltación a la Semana Santa, empero, que sé, ha superado con creces. Con las creces de la verdad, de la fe y de la palabra precisa. Es un nazareno de Valme, pero nazareno al fin y al cabo, de Domingos de Ramos por estrenar. Es buena persona. Tímido, suyo-suyísimo, trabajador, gracioso (aunque alguen piense lo contrario), simpático, y otra vez, buena, buena persona. Por eso, es orgullo tenerle por amigo. Mañana se desnudará otra vez. Ya lo hizo un día, y emocionó a media Dos Hermanas, que le escuchó lo que ya sabía de él. Mañana, digo, media Dos Hermanas escuchará todo lo que nunca imaginó escuchar precisamente de sus labios: mañana cierta, futuro cierto, Pasión certera y cielos que no perderemos... Sé que el Pregón de la Semana Santa es controvertido. Lo sabe él. Pero yo les digo a ustedes, si tienen a bien atender esta petición, que escuchen a Hugo cuando solo quede una semana, siete días, para el Domingo de Ramos. Escucharán lo que nunca imaginaron que se podría escuchar. Escucharán palabras bordadas, cuyo eco se propagará, tarde o temprano, por la Dos Hermanas incierta de estos días. Ya lo verán.
PD: Adjunto aquí los "Perfiles" que hubieran salido en Azahar si el espacio así lo hubiera permitido.
PERFILES
Edad: 32 años.
Hermano de: La Borriquita, Valme y Sacramental.
Una oración: ¡Valme, Señora!
Un pasaje evangélico: Las Bienaventuranzas.
Un Cristo: Jesús el Nazareno, siempre triunfante: reinando desde el trono de humildad de su borriquita, muerto sobre el Árbol Santo de la Vera-Cruz, al tercer día Resucitado y, para la eternidad, hecho Pan de Vida en la Eucaristía.
Una Virgen: María, Valedora y Estrella de nuestras vidas.
Una marcha: Cualquiera de las que se consideran clásicas, que son intemporales y que, por ello, permanecen felizmente ajenas a las “modas” que ahora parecen imperar.
Un día de la Semana: El Domingo de Ramos.
Una flor: La rosa.
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