A pesar de que el nota sale hoy feliz montado en brioso corcel, por la noche prácticamente yacerá entre tinieblas en la plaza de El Salvador. Por eso adelanto que esta Semana el sufrido visitante de este blog apreciará mi ausencia. Mejor me parece hacer ahora un borrón y cuentas nuevas, ligero suspiro, hasta la llegada de la Resurrección. Aparcamos, en fin, entradas por doquier, a la espera de las Felices Pascuas.
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