CUATRO FOTOS, CUATRO HISTORIAS

Como última entrega relativa

a la Semana Santa

y muestra de la imperfecta colección

de imágenes que he recogido de la misma,

apunto aquí cuatro fotos (cuatro historias)

derivadas de cada una.

EL MANTO DE LA ESPERANZA. No es por reabrir la polémica, pero si en Cautivo las cosas se hacen así desde hace años (se busca la expectación y el cambio brusco en la imagen de la Virgen cada Domingo de Ramos) a fe que lo han conseguido con el manto en cuestión. Me reafirmo.


EL CONJURO DE LA VIRGEN DE LA CUEVA. Algo debe haber cambiado desde hace pocos años para que el tradicionalmente soledado Miércoles Santo, el único día de la Semana Santa en el que no se mira hacia el cielo, ahora esté condenado a la terquedad de la lluvia repentina. En últimos cuatro, dos sin salir, uno sí pero de chiripa, y otro sin incidencias pero con las nubes amenazantes. ¿A quién debemos reclamar allá arriba?


APLAUSOS A LA CRUZ DE GUÍA. Personalmente, creo que ha sido la imagen de la Semana Santa. No recuerdo tanta expectación en la calle para ver pasar a una cofradía en Dos Hermanas. Casi dos horas antes de reloj, ya había gente aguardando en la Capilla de Vera-Cruz. En Real Utrera, más de lo mismo. Espectacular la calle más larga, con filas de cuatro y cinco personas. ¿Han visto las fotos en la prensa? Aunque tímidas, palmas al paso de la Cruz de Guía por la Carrera Oficial.IMPENSABLE FINAL. La repentina lluvia sevillana también regó tímidamente el Sábado Santo nazareno, lo mínimo para cobijar a la Soledad en el Gran Poder y al Cristo Yacente en San Sebastián. Aunque los periódicos ya se han hecho eco con más calidad, yo estuve allí.