sábado, 6 de febrero de 2010

¿DÓNDE ESTÁ LA GRIPE A?


¿Qué fue de la gripe A? Han pasado tantos meses desde aquellas primeras voces de alarma que parece que hace mucho, mucho tiempo cuando los gobiernos desencadenaron esa auténtica alarma social que tantos pingües beneficios han arrojado a las principales empresas farmacéuticas. En pleno mes de noviembre, la gente moría de gripe, aunque no importara si era el desencadenante cruel de una anterior y dolorosa enfermedad terminal. En aquellos días de incierto invierno, recelábamos de todo aquel que estornudara cerca de nosotros. Sospechábamos el cierre de colegios en cuarentena, incluso fábricas u otros centros donde el contagio se supondría masivo. Como no podía ser de otra manera, no faltaron los que pusieron en duda el sistema tradicional de comulgar en misa, o lo más sencillo, que es darse un beso o un apretón de manos cada vez que saludamos a alguien. Las dosis antivirales se reúnen almacenadas en algunos países (incluidos España), puesto que no se han atendido los suficientes casos (lo que es bueno), aunque para ello se hayan tirado miles de euros a la basura (lo que es…) Y todo por la tan manida teoría del caos o la histeria colectiva. En estos tiempos, nada mejor que un par de noticias en el telediario, una cadena apocalíptica a través de los correos electrónicos… y a ganar dinerito. ¿Se lavan ustedes las manos con esos geles especialísimos que en algunos lugares públicos se pensó instalar al lado de las escaleras mecánicas? ¿Tienen acopio aún de las famosísimas mascarillas? Dirán lo que quieran, pero como el zumo de naranja, la leche caliente con miel, o en su caso, una buena carrerita por ahí aunque haga mucho frío, no hay nada para sortear la gripe, sea de la letra que sea.

1 comentario:

L dijo...

Yo conozco a más gente que enfermó después de la vacuna que con la gripe.
Una cosa que me contaron y no sé si será verdad, pero me temo lo peor, es que el comité que decide cuándo se declara una pandemia mundial es secreto. Ni los propios gobiernos saben quiénes son los tíos que deciden cuándo algo o no es epidemia. Por lo que no se pueden pedir responsabilidades a nadie.