lunes, 16 de marzo de 2009

LIBROS DE IDA Y VUELTA


¿Qué sucede en la mente de una persona cuando decide donar todos sus libros a una biblioteca? Lo que en primer lugar, a ojos del receptor, supone una alegría inmensa porque supone reunir más títulos para ser compartidos, se torna casi de inmediato en una profunda tristeza. En todo ofrecimiento suele radicar la virtud de saber entregar a quien necesita. Pero el caso concreto, que resume las adquisiciones de una persona joven a lo largo de su carrera como estudiante, resulta vacío, falto de toda ética o reconocimiento. ¿Por qué un joven que recién salió del Bachillerato se desprende de toda su colección literaria? ¿Acaso le estorba en casa? Aquí, apilados en una mesa de trabajo se desperezan de un largo sueño La casa de Bernarda Alba, Luces de Bohemia. Réquiem por un campesino español, La Regenta… Intactas ediciones de prestigio que han sido abandonadas de un estante, quizás olvidado también, que ya no recogerá más polvo. Buen asiento tendrán ahora.

1 comentario:

J10 dijo...

No hay mal que por bien no venga. Ojalá que por esos libros despreciados se paseen a partir de ahora nuevos ojos que revitalicen su literatura encapsulada.