lunes, 13 de septiembre de 2010

LOS NIÑOS, AL COLEGIO


La propuesta que lanzó hace unos días la confederación española de padres y madres de alumnos (CEAPA) acaba de proclamar la necesidad de una serie de mejoras en el sistema educativo en aras de la “conciliación de la vida profesional y laboral de los padres en relación a los estudios de sus hijos”. Tócate los cojones. De un tiempo a esta parte, el odiado vocabulario que nos trajo la Logse se ha convertido en todo un metalenguaje eufemístico, con el que decir cosas ridículas sin que suene mal, y encima, con palabrería culta. Casi nada. En roman paladino, lo que quieren estos papases y mamases es, simplemente, que los colegios estén abiertos 12 horas al día para tener allí a sus hijos… y que también se abra los domingos. Más concretamente: todos los días del año, sin pausa. Eso es la conciliación, ya ven. De verdad que, de un tiempo a esta parte, la mayoría de las noticias que se cuentan en los periódicos me suenan a chiste. En materia de educación, especialmente. No piden los progenitores que los centros educativos estén dotados desde el primer día con el personal docente, ni con los materiales necesarios acordes con el tiempo que vivimos. No piden mayor autoridad del profesorado en el aula, ni echan en falta un sistema que exija una formación sólida ni unos conocimientos generales para una vida intelectual, no. Para eso basten las cosas como están. Sí que considera necesario la CEAPA un lugar en el que dejar a los niños cuando plazca, incluidos los fines de semana, porque se colige pues, los padres no tienen por qué preocuparse de la compañía de sus hijos, ni tienen familiares ni amigos a los que pedir ayuda para cuidarlos en horas de trabajo. Para eso ya están los profesores, que son muy vagos y no hacen nada en todo el día. Espero que ningún profesor tenga descendencia si prospera la iniciativa de la CEAPA, porque con esta carga laboral que se le avecina, creo que tampoco tendrían mucho tiempo para cuidar de los suyos.

2 comentarios:

L dijo...

Lo normal por estos lares es que en secundaria estén en el centro hasta las 4 o 5. En primaria salen antes. Claro que las jornadas laborales acaban a las 5 de la tarde. Lo que sí existen son centros públicos de actividades extraescolares, adonde van los niños cuyos padres trabajan. Son centros aparte, donde hay cuidadores, no profesores ni maestros.
Lo que tenían que hacer los bombillas de educación y aledaños es plantear la creación de este tipo de centros, se daría trabajo a muchos cuidadores y monitores. Eso o plantear reducir la jornada laboral en España.
Pero como en este país prima la cara dura, se opta por soluciones-parche que no sirven sino para aumentar los problemas.

Fae dijo...

Y lo que te rondaré, morena...
Llevas razón.